El idioma inglés, del cliché al ‘must’
Por Andrés Moreno, Fundador y CEO de Open English
Desde hace décadas, hablar inglés se considera una herramienta básica de comunicación para cualquier persona que desea viajar por el mundo o impulsar su carrera en el extranjero. En el aspecto laboral, el uso de un segundo idioma, específicamente el inglés, representa abrirse las puertas a un mundo nuevo de oportunidades profesionales que se reflejan en un crecimiento profesional y económico.
La globalización, aunada al predominante uso de Internet en los procesos productivos de la economía internacional, ha hecho que el inglés sea más que un símbolo de estatus y se convierta en una necesidad. Al igual que diversas especialidades o posgrados, el inglés genera oportunidades, determina la capacidad de empleo y extiende los horizontes.
Educación
De acuerdo con datos del Instituto Mexicano de la Competitividad (IMCO) el 80% de los alumnos egresados de educación básica presentan un desconocimiento total del idioma inglés y en sólo el 48% de las universidades del país, el inglés es una materia obligatoria. Esto provoca que al salir al mercado laboral, los estudiantes no posean las características que requiere el mercado debido a una trunca preparación escolar.
Esta necesidad bilingüe incluso se ve reflejada en los programas gubernamentales, en los que reconociendo que tomaría una década como país para que todas las escuelas tengan una condición bilingüe, el gobierno federal ha programado que a partir del ciclo escolar 2018-2019 se actualicen los planes de estudio, libros de texto y se logre la capacitación a un millón 200 mil maestros.
El bajo nivel de inglés que prevalece en México, representa un obstáculo al crecimiento y desarrollo de las personas, sobre todo, los estudiantes recién egresados que buscan una oportunidad en el mercado laboral.
Necesidad Laboral
El uso del idioma inglés representa una herramienta indispensable en las industrias que tienen filiales o matrices en otros países como Estados Unidos o Europa, y es vital para mantener los negocios y la competitividad de las empresas mexicanas.
La falta del dominio de esta lengua hace que el país pierda competitividad frente a sus principales socios comerciales; como individuos, genera una desventaja frente a las personas que sí posean esta herramienta.
Aunado a esta problemática, se debe destacar que la mayor parte de las empresas en el país no destinan recursos para capacitación en el habla inglesa a sus empleados. Esta corresponsabilidad entre gobierno y empresas, dejan en desprovisto la oferta laboral en un mundo globalizado de predominante habla inglesa. Derivado de esta coyuntura, en la actualidad resulta una gran ventaja poseer el dominio del idioma inglés.
En un estudio llevado a cabo por Open English, 74% de los estudiantes de Inglés señalaron que alcanzar el nivel de fluidez de aprendizaje del idioma tuvo un impacto positivo en su vida profesional. Por esta razón, tomar un curso de inglés, más allá de una materia adicional o un indicativo de estatus, es un complemento necesario para mejorar la calidad de vida de las personas, y por ende, del país en su conjunto.